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ENRÍQUEZ DESCENDIÓ Y VENDIÓ A LA TRINCA EN EL 2006

IRAPUATO.- En un día como hoy pero del año 2006, el equipo Irapuato de primera “A” descendió a la segunda división a pesar de jugar el partido de promoción contra Delfines de Coatzacoalcos.

La trinca fresera estaba en ese entonces en manos del empresario mueblero Concepción “El Choplin” Enríquez, quien durante muchos años tuvo “secuestrado” el fútbol profesional y por malos manejos y malas decisiones arrancó los sueños de la afición fresera.

“El Choplin” Enríquez, quien con su poderío económico ha sabido entrometerse a la política apadrinando presuntamente campañas del PAN, ha sido un lastre para el  deporte y pese a ello le siguen dando espacios y privilegios, al grado de meter a su hijo como regidor Cristhian Enríquez, quien solo ha hecho ridiculizar la figura de representante popular regalando pelotas y ahora intenta figurar para escalar a otro hueso bajo el cobijo económico de su padre.

El Choplin Enríquez , durante las últimas dos décadas ha sido un personaje  de confrontación y polémica en el fútbol pero su desastre en la temprana 2006-2007 no se olvida cuando dejó a la afición fresera sin equipo de ascenso.

Tras la derrota en el partido de vuelta contra Coatzacoalcos, el empresario intentó hacerse ojo de hormiga y enseguida vendió lo quedó de la trinca, un equipo de segunda y tras ello vendrían otros intentos como hasta ahora,  de regresar el fútbol profesional a Irapuato.

El susodicho Concepción Enríquez, ha sido un consentido en la política panista al grado de querer eternizarse en el consejo municipal del deporte e imponer a otros funcionarios en la CODE como ocurrió con Isaac Piña.

De ahí, su gran influencia en el deporte y la política al amparo de las cúpulas panistas que lo han utilizado para sus fines propios de partido a cambio de favores y facturas en el poder. 

Enríquez, es parte de los protagonistas que han hecho de la trinca fresera una historia de negocios y grandes decepciones para la afición. Una afición engañada y  la cual se le sigue dando atole con el dedo mientras políticos y empresarios solo ven por sus intereses personales y grupales.